¡A ponerse series! (II): A dos metros bajo tierra (2001-2005)

El nombre de Alan Ball puede que no sea muy conocido, pero si digo que es el guionista de American Beauty (1999) es posible que ya vaya sonándoos más. Es una película que recomiendo a quienes no la hayáis visto, no solo porque en su momento supusiese una mirada innovadora a la sociedad estadounidense, sino también porque la profundidad de los personajes hace que el espectador se convierta en parte activa de esta obra de arte, llevándole a reflexionar sobre su propia vida.

¿Por qué hablar de American Beauty en una reseña de la serie A dos metros bajo tierra? Sencillamente porque lo dicho para la película es igualmente válido para la serie. En ésta, Alan Ball también se atreve a tratar todo tipo de temas tabú a lo largo de las seis temporadas que dura la serie. Sexo, homosexualidad, vejez, enfermedades o trastornos mentales, son sólo una pequeña lista de los temas que con una increíble humanidad y conocimiento trata, pero sobre todo hay un tema constantemente presente a lo largo de toda la obra: la muerte.

Alan Ball

La muerte está presente desde el principio, de hecho, los protagonistas son una familia que trabaja en una funeraria, por lo que no solo habla de este tema, sino que forma parte de la vida cotidiana de los protagonistas (aparente paradoja). Esta muerte no es algo aislado, sino que se muestra formando parte de la vida, como forma parte de todas nuestras vidas y se nos enseña cómo influye en los protagonistas, cómo entierro tras entierro, las distintas comunidades y personas que presenta en la serie, van afrontando la muerte. Hay que tener en cuenta que para la sociedad de Estados Unidos que el duelo por la muerte de una persona dure más de unos días suele estar mal visto. Es por esto que la serie es especialmente valiente en su contexto.

Como ya he señalado antes, esta producción sirve de catalizador para poner al espectador en contacto consigo mismo, gracias a la delicadeza, variedad, profundidad y valentía con la que todos los temas presentes en esta serie están tratados. Casi sin darse cuenta el espectador irá formando parte de la familia protagonista, identificándose con alguno de los personajes, o con todos, en algún momento y esto es gracias también a la magnífica interpretación por parte de los actores y actrices que conforman el elenco, de los cuales no quiero destacar a ninguno en concreto para hacer justicia al magnífico trabajo de todos ellos. En cuanto a reconocimiento internacional, podemos remitir a este enlace o a los diferentes premios y reconocimientos que ha recibido.

Animo por ello a ver esta serie, pero sobre todo, a verla en compañía, puesto que así no solo aprenderéis más de vosotros mismos sino también con y de quien os rodea.

Escrito por "Mister X"