Llamar la atención del gran público y crear polémica es uno de los ases que una agencia de publicidad se guarda siempre bajo la manga. Ante casos así, siempre puede rondar la duda de si se buscó de manera premeditada o si solamente fue una consecuencia involuntaria. Aunque se tratara de la última posibilidad, existen colectivos que sienten vulnerados sus derechos y no dudan en expresar su indignación, produciendo así que se hable muchísimo más de dichas campañas. Sin duda, en la publicidad no hay mal que por bien no venga.
Esto no es algo aislado, sino que sucede en cualquier país del mundo. Alguna vez habremos visto campañas protagonizadas por gente sufriendo de hambruna, con sus correspondientes quejas. O protestas a las supuesta incitaciones a la zoofilia de un anuncio de hamburguesas. Otras, con algo más de moralidad añadida, simplemente podría suscitar intriga al menos impresionable.
Sobre las campañas que mostraremos a continuación valoraremos su repercusión en el mercado y lo que ellas han podido transmitir al público desde un punto de vista neutral. ¿Es realmente necesaria su censura o, simplemente, buscan provocar? Opinad vosotros mismos.
BurgerUrge, una conocida cadena de hamburgueserías de Australia, quiso destacar por encima de sus competidoras con este peculiar anuncio. En él podemos ver cómo una mujer lame a una vaca, ataviada con una chistera y con un eslogan intimista que la cataloga como premium, posiblemente por el suculento manjar que BurgerUrge podrá ofrecer gracias a ella. La polémica vino cuando el sector australiano más conservador afirmó que el eslogan y la imagen en cuestión parecen sugerir relaciones sexuales entre la vaca y la mujer; aunque el comité regulador de contenidos en publicidad lo rechazó, la asociación ha seguido presionando para conseguir censurarlo.
In Eternum es una conocida marca de crema antiarrugas en Reino Unido. Quizás en la campaña que apreciamos en la imagen se lleva al extremo el prototipo de belleza que anuncia... hasta la muerte, según las quejas recibidas. La asociación que regula los contenidos publicitarios recibió un centenar de quejas pidiendo su retirada, tachándola de espeluznante. Algo de miedo produce, pero, realmente, ¿quién querría tener este aspecto tan demacrado? Quizás algún fan de la saga Crepúsculo.
AXE, la conocida firma de cosmética para el hombre, se ha caracterizado por mantener campañas publicitarias provocativas a lo largo de su historia. Este suceso, por ejemplo, tuvo lugar en España, donde asociaciones feministas la encontraron sumamente machista y degradante para la mujer. Aunque este no sería sino un previo de una serie de spots con cierta polémica.
California Sun es una marca de bronceador estadounidense. La polémica nació en el noreste de San Francisco, llegando al extremo de cubrir con una lona negra el cartel. No es que fuera sexy, sino que los vecinos lo tildaron directamente de pornográfico. Una semana después, se tuvo que retirar de la marquesina. Pero, como vemos, solamente es una chica en bikini.
Aunque la publicidad, y el valor de marca que ella crea, cada vez cobre más importancia a la hora de comercializar un producto, los ciudadanos aún no tenemos en cuenta la responsabilidad de las marcas como elemento clave para hacerlo. Según un informe de la Fundación Adecco, los tres valores que debe tener una marca para ser entendida e interpretada como responsable por parte de los ciudadanos son la transparencia (para el 100% de los ciudadanos), ética (según el 94% de los ciudadanos) y ser respetuosa con la comunidad (80% de los ciudadanos).
En resumen, campañas con más transparencia, más ética y más respeto a la comunidad donde actúan. El camino ya está marcado.
Escrito por Mariela B. Ortega
Pufff y luego tienes esos anuncios de zapatos cuyos carteles juro que parecían un culo en tanga.
ResponderEliminarLa publicidad va cruzando fronteras y la sexual hace mucho que dejó de ser la más llamativa. Para muestra la crema
Besos