Descubriendo a (XVII): MORDISCO

Ya lo decía Nietzsche, sin música la vida sería un error. La música es parte indiscutible de la cultura. La creatividad que puede aportarnos el arte, unida al disfrute y la desconexión de la música electrónica, aparente y notablemente ligada al ambiente nocturno y fiestero, son dos elementos indispensables para disfrutar de la atmósfera creada por el dúo de dj's MORDISCO. Este proyecto nació en Granada en el año 2011, como afición y con el fin de disfrutar de la música de baile de una forma diferente, apartada de lo que normalmente podría encontrarse en cualquier local de música electrónica. A partir de reuniones de amigos que compartían la misma pasión, arte, música y cultura comenzaron a proyectarse en las noches Mordisco Club, originadas en locales granadinos tan emblemáticos como Bowie Club o PlantaBaja, y que se han consagrado con éxito a lo largo de estos años también fuera de las fronteras granadinas. Disfrutar compartiendo. Reflexionar bailando.

Organizadas por ellos mismos, las noches Mordisco Club giran de la mano de la cultura en torno a una temática central de índole social, viajando a través diferentes proyecciones visuales, fragmentos,  ilustraciones e intervenciones que tienen lugar en la fiesta. Un regalo mutuo entre el público y el artista en el que, además de ofrecernos su música, encontramos energía, sentimiento, arte y reflexión sobre aquellas manifestaciones que les emocionan, sin olvidarnos, por supuesto, del disfrute y del baile. Valoran la libertad a la hora de hacer lo que les apasiona, de crear una fiesta a la que ellos estarían encantados de ser invitados, sin dejar de bailar ni disfrutar con sus propuestas y, por si fuera poco, incluyendo invitaciones a artistas nacionales e internacionales que ellos mismos siguen, como han sido los sets de Russ Chimes, Xinobi, John Talabot, entre otras muchas colaboraciones. 

 

Pero, ¿quiénes forman Mordisco? Hugo Carretero, profesor de la Universidad de Granada, y Ángel Lupiáñez, diseñador e ilustrador profesional, dan vida a la música mordisco, festiva y desinhibida, un sonido diferente al electrónico convencional que avanza desde el Indie al Nu Disco, aunque también remitan a grandes éxitos del pasado o realicen remixes de otros artistas consagrados, colaborando con grupos como Fuel Fandango y su Shiny soul y Hola A Todo El Mundo con And a just man howls. Además, su compromiso con la cultura va más allá de sus actuaciones musicales y de sus proyectos con Mordisco, incluyendo la dirección artística de RIT/MO Festival junto a Carlos Díaz, un pequeño gran festival que une cultura, reflexión y música independiente emergente en plena naturaleza.

En sus sets podemos encontrar electropop, house, indie-dance con actitudes rockeras, entre muchas otras sorpresas, lo que acaba creando un ambiente dinámico con sesiones invadidas por una luz y frescura de lo más personal. De esta forma, logran crear un sello propio a pesar de que todo lo que escuchas te pueda sonar o traer algún recuerdo. Pero más allá de que su música nos haga bailar, sus sesiones logran ser una experiencia cultural completa, con la proyección visual de diferentes imágenes y diferentes textos literarios, que suelen partir de una idea primigenia que da sentido a cada fiesta de Mordisco. Así, en una sesión de este dúo encontramos un ambiente cultural y de disfrute donde llegan a darse la mano desde escritores a filósofos con diferentes artistas musicales y pictóricos, siendo imposible escapar sin que algún fragmento de su propuesta te haya atrapado, te haya mordido. 

Con la temática del paso del tiempo, la celebración de su V Aniversario el pasado mes de abril en la Sala Prince de Granada contó con la presencia del artista invitado John Talabot, quien se entregó a la noche y llegó a realizar un set de hasta cuatro horas de duración. Sin duda, esta celebración ha culminado, tras una tremenda evolución, con el lanzamiento de Calíope, pieza que alude a la musa de la poesía y que reflexiona sobre cómo el lenguaje resulta limitado para expresar aquello que sentimos. Editado bajo el sello alemán Nu Disco Your Disco, fue publicado el pasado mes de febrero y en él también se incluye el tema Paraíso, directo para disfrutar en las noches de verano y que podemos escuchar a continuación.

También otro sello discográfico, en este caso el londinense Midnight Riot, reconocido también en el ámbito musical Nu Disco, ha elegido el tema Julio para ser incluido en el recopilatorio Midnight Riot vol. 10, publicado el pasado mes de enero. En él encontramos un divertido slow disco en el que aparece un tema originario del mítico Julio Iglesias, No llores, mi amor, que nos trae para bailar al presente desde 1977. Y es que el presente que se le presenta a Mordisco es aún más que prometedor, con confirmaciones en festivales musicales veraniegos tan aclamados como Low Festival (29 de julio en Benidorm), Arenal Sound (2 de agosto en Castellón) o CanelaParty (6 de agosto en Málaga).

Less minimal,
Mordisco.

Solo se baila animal. 

Solo los animales bailan 

porque bailar es previo al lenguaje.

Bailar es bestial,

es volverse (volver a ser) bestias. 

Mirar los ojos de una bestia para entender algo del mundo de la danza.

No hay cansancio, ni límite. Hay movimiento.

¿Qué es el cansancio sino el cuerpo asustado ante el límite?

A punto de rendirse.

Fuera de ese límite, el cuerpo es potencia.

Podéis escuchar su música y saber más sobre ellos a través de su página en Soundcloud, Facebook y Twitter.

Escrito por Mariela B. Ortega