La Oreja de Van Gogh, la historia de un sueño (I)

Un frío y ya lejano día de enero de 1996, surgiría en San Sebastián un grupo formado por cuatro chicos universitarios, cuya mayor ilusión era pasar el tiempo versionando canciones de sus artistas favoritos. A medida que van pasando los meses, empiezan a invertir cada vez más tiempo en el proyecto, empezando a componer temas propios, aunque se dan cuenta de que ninguno de ellos tiene una voz especial para cantar. Después de varios intentos contando con gente conocida, uno de los chicos, Pablo, conoce a Amaia Montero y le propone entrar a formar parte del grupo. Tras el sí de Amaia, y después de que el resto la oyera cantar, se convirtió indiscutiblemente en la voz de la banda. Ni Pablo, Haritz, Álvaro, Xabi o Amaia se imaginarían que esa decisión marcaría un antes y un después en la historia de la música pop en España, ni que, años más tarde, se convertirían ellos mismos en admirados artistas, cuyas canciones versionan hoy día otros grupos noveles.

Al principio sólo tocaban en bares y salas con un grupo reducido de gente, hasta que, un año más tarde, decidieron presentarse al VI Concurso Pop-Rock Ciudad de San Sebastian. Para ello, grabaron una maqueta, que incluía los temas Viejo cuento, Dos cristales, Aquella ingrata y El árbol. Algunas de esas canciones formarían parte de su primer disco, pero por entonces ellos aún no lo sabían.

Cuando lograron ganar el primer premio, tuvieron la oportunidad de ser escuchados y, poco a poco, su nombre ya comenzaba a ser algo más conocido a través de las radios más populares de nuestro país.

Intentando hacerse un hueco en el mundo de la música gracias a la composición de los chicos reflejada en la voz de Amaia, la suerte les llegaría en 1998, un año fundamental en la trayectoria del grupo. Por fin, La Oreja de Van Gogh logra que la discográfica Epic/Sony Music se interese por ellos. En los estudios Ashram de Nacho Cano en Madrid, y teniendo a Alejo Stivel como supervisor de su trabajo, confeccionaron el que sería su primer álbum, Dile al Sol, el cual se publicó el 18 de mayo de 1998.

El primer single escogido para presentar sería El 28, cuyo título alude al autobús de la línea 28 de San Sebastián. Este sencillo logró preparar el terreno para Soñaré, el segundo single extraído del disco y con el que lograron darse a conocer a lo largo de nuestro país.

En la ceremonia de los Premios de la Música 1999, consiguieron el galardón al Mejor Artista Revelación y al de Mejor Autor Revelación, consiguiendo también el Premio Ondas al Artista del Año. Además de todo esto, la banda recorrió toda la geografía española durante casi un año (desde la Navidad de 1996 hasta finales de 1997), actuando en más de 150 conciertos. Posteriormente realizaron una gira junto a los veteranos Hombres G. Cerca de un millón de personas pudieron disfrutar del directo del grupo, lo que ayudó a consolidar ese sonido compacto y fresco que pretendían ofrecer.

Aunque las ventas no fueron muy elevadas al principio, Dile al sol logró afianzarse con el paso de los meses, alcanzando las 800.000 copias vendidas, es decir, siete discos de platino, el mismo día que la banda donostiarra publicaba su segundo álbum de estudio.

El 11 de septiembre de 2000 ve la luz El Viaje De Copperpot, que fue grabado en estudios de Madrid, Francia y Londres, y producido por Nigel Walker. La revolución a partir del lanzamiento fue rotunda, quedando confirmado el despegue del fenómeno LOVG, cuyo éxito traspasaría fronteras.

Este trabajo destaca su innovación en cuanto a sonido y en melodías, mucho más frescas y que se abren a las propuestas europeas. Doce temas con estribillo pegadizo componen el álbum, que no abandona en ningún momento el estilo de La Oreja y, además, pone de manifiesto la experiencia conseguida por el grupo en todos los sentidos.
El primer single escogido para promocionar el álbum es Cuídate, un tema muy parecido al estilo de Dile al sol y que les sirve para enlazar con los nuevos sonidos de su segundo trabajo. A esta canción le siguen otros éxitos como París, La playa, Soledad o La chica del gorro azul.

Además, durante los años en los que la banda promocionó su segundo álbum, su fama se consolidó con varias colaboraciones que hizo Amaia Montero con otros artistas del momento, entre los que se pueden contar José Luis Perales, versionando su éxito su éxito Por qué te vas, y dos baladas: que cantó con Álex Ubago, Sin miedo a nada, y El Canto del Loco, Puede ser; estas colaboraciones llegaron a ser grandes éxitos en las emisoras de radio españolas y latinoamericanas.

El éxito y la consolidación del grupo quedaría confirmado tras conseguir más de un millón de copias vendidas de su segundo disco, hecho que les abriría las puertas hacia los mercados de Latinoamérica.

El 28 de abril de 2003, La Oreja de Van Gogh publica su tercer trabajo de estudio, Lo que te conté mientras te hacías la dormida.

El álbum, que incluye catorce canciones y un bonus track, sigue la línea de los anteriores de La Oreja, aunque algunas canciones sorprenden por el registro poco usual dentro del estilo pop tan característico del grupo. Gracias a este trabajo, también tuvieron la oportunidad de recorrer gran parte del continente sudamericano, siguiendo la estela de los anteriores lanzamientos y siendo otro éxito de ventas, con el que conseguirían su tercer disco de diamante.

El 2006 sería otro de los años más significativos en la carrera del grupo. La Oreja de Van Gogh publica su cuarto trabajo de estudio, titulado Guapa.


Se trata de un álbum especial para La Oreja de Van Gogh: es el trabajo de diez años juntos. Doce nuevos temas que sirven de celebración para este aniversario, pero que contiene un estilo más maduro y un sonido más rock.

Tras la publicación en 2003 de "Lo que te conté mientras te hacías la dormida", La Oreja se tomó el tiempo necesario para realizar este cuidado trabajo, con una esmerada composición y sus consecuentes arreglos. En este disco están representados los patrones musicales de la banda de San Sebastián, esos que han convertido su obra en canciones con identidad propia. Guapa se convierte así en La oreja de Van Gogh con más energía.



En noviembre de 2007, una sorprendente noticia dejaba impactados a los seguidores de La oreja de Van Gogh: Amaia Montero anunciaba en el blog oficial de la banda que decidía dejar el grupo tras 11 años de trayectoria, para iniciar así su carrera como solista. Sin duda, una noticia que revolucionaría el panorama de la música en España. Por su parte, el resto de componentes escribieron su respectivo comunicado en el que informaban a todos los seguidores de su intención de seguir componiendo y que pronto comenzarían a buscar a la que sería la nueva voz de La Oreja de Van Gogh.

Escrito por Mariela B. Ortega